Un día como hoy de 1896, nació Alfonso Caso, antropólogo y arqueólogo quien fue fundador de instituciones dedicadas a la protección del patrimonio arqueológico, como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Museo Nacional de Antropología (MNA).
Asimismo, fue profesor de lógica y de epistemología, de arqueología mexicana y etnología general en la Escuela Nacional de Altos Estudios (hoy Facultad de Filosofía y Letras); filosofía del derecho en la Escuela Nacional de Jurisprudencia, y arqueología mexicana en la Escuela Nacional de Antropología (ENA), institución de la que fue cofundador.
En 1926 comenzó su interés por la arqueología y a la postre, el cruce de caminos con Oaxaca, Monte Albán y sus culturas ancestrales.
Para 1929, aparte de pequeños ensayos, ya había publicado Las estelas zapotecas (1928). Ante la necesidad de establecer alguna cronología de esta cultura, en 1930 inició las exploraciones en Monte Albán, las cuales se continuaron por veinte temporadas.
Además, Caso fue un destacado intelectual y realizó importantes descubrimientos arqueológicos, por ejemplo en 1932 descubrió la Tumba 7 de Monte Albán, hito de la arqueología mexicana, y Monte Negro. Gracias a esto, publicó una gran cantidad de libros, artículos, así como conferencias y literatura popular.
Aunque Alfonso Caso no estuvo presente en las últimas, se produjo un material asombroso, tres importantes volúmenes basados en esos trabajos como son: Urnas de Oaxaca (1952), La cerámica de Monte Albán (1967) y El tesoro de Monte Albán (1969).
Como resultado de trayecto obtuvo numerosos premios y reconocimientos por su labor, entre los que destaca el Premio Nacional de Ciencias, y fue el rector número 28 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y se desempeñó como jefe del Departamento de Arqueología del Museo Nacional.
Una de sus aportaciones más importantes fue el desciframiento del sistema de escritura de las culturas prehispánicas de Oaxaca.
Alfonso Caso fue el estudio de los códices y las inscripciones del México antiguo. Encontró la clave fundamental de la historia mixteca en un documento, aparentemente de importancia secundaria, que publicó en 1949 con el título de “El Mapa de Teozacualco”.
En una célebre conferencia pronunciada ante la Sociedad Mexicana de Antropología el 19 de mayo de 1938, estableció una nueva correlación, rectificando las anteriormente propuestas, entre el calendario azteca y el cristiano.
De igual manera, Caso también fundó aquellas instituciones que aseguraban la protección del patrimonio arqueológico de los mexicanos, como el INAH y fundó el Instituto Nacional Indigenista, organismo en el que pasó los últimos años de su vida.
Por último, ocupó el cargo de vicepresidente de la American Archaeological Society y perteneció a distintas sociedades científicas: miembro correspondiente de la Academia Nacional de Ciencias de Washington, honorary fellow del Royal Anthropological Institute of Great Britain and Ireland, membre d’Honneur de la Société des Américanistes de Paris, miembro de la American Anthropological Association y de las Sociedades de Geografía y Estadística y “Antonio Alzate”, de México. Fue miembro fundador de El Colegio Nacional; de la Academia Mexicana de la Historia, correspondiente de la Real de Madrid, y de la Sociedad Mexicana de Antropología.
Con información de Once Noticias
Más historias
Con acciones concretas de bienestar, la Primavera Oaxaqueña da prioridad a quienes menos tienen
Es el Parque Primavera Oaxaqueña un símbolo de bienestar y prosperidad: Silva Romo
Ratifica Silva Romo respaldo a iniciativas de la Primavera Oaxaqueña